A pesar de recién haber llegado de las vacaciones, lo que uno acostumbra a hacer es a planificar el año. Sin embargo, mientras pasa el «post relax», o sea, los primeros momentos de nuevo en casa, los gastos tienden a ascender desmedidamente creyendo simplemente que en la casa no hay nada.
Una manera para evitar esto es deshacerse lo más rápido posible de las vacaciones: bolsos, prendas sucias, fotos, etc., todo deberá quedar para más adelante así la compenetración en la economía familiar y la planificación a futuro pasan nuevamente a ser uno de los temas fundamentales, para así poder disfrutar mejor del momento en que se piensen las vacaciones futuras.
