Hablar de dinero continúa siendo uno de los temas más delicados dentro de las relaciones de pareja. Tratar las cuestiones económicas puede resultar incómodo y, en ocasiones, provocar tensiones o desacuerdos. En las primeras etapas de una relación, la ilusión de compartir experiencias y hacer planes juntos suele eclipsar las preocupaciones financieras, y la distribución de los gastos apenas se tiene en cuenta. Sin embargo, cuando la relación avanza y se vuelve más estable, aparecen decisiones más importantes que exigen una comunicación clara sobre el aspecto económico: la compra de una vivienda, el ahorro para proyectos comunes o la gestión de los gastos cotidianos.
Conscientes de que hablar de dinero sigue siendo un desafío para muchas parejas, Nara Seguros, compañía especializada en seguros de salud, vida y ahorro, ha reunido cinco recomendaciones clave para ayudar a gestionar las finanzas en pareja de una forma práctica, equilibrada y eficaz.
1. Hablar de dinero sin miedo
La confianza mutua es fundamental en una relación, y eso incluye la libertad para hablar de cualquier tema, incluido el dinero. Conocer los ingresos, los gastos personales y las expectativas económicas de cada uno permitirá tomar decisiones informadas y llegar a acuerdos en cuanto a la distribución de los recursos.
2. Abrir una cuenta de ahorro en conjunto
Mantener cuentas separadas puede ser importante para preservar la independencia, pero tener una cuenta conjunta para ahorrar es una excelente manera de unificar objetivos. Establecer un presupuesto y acordar cuánto aportaréis cada mes en función de vuestras posibilidades será un buen punto de partida.
3. Utilizar apps para gestionar los gastos
Hoy en día, existen numerosas aplicaciones diseñadas para simplificar la gestión de los gastos y el ahorro, como Tricount, Splitwise y otras similares. Estas herramientas permiten un control detallado de los gastos mensuales, facilitando la visualización de en qué se invierte el dinero y quién asume cada pago. Así, se puede ajustar el presupuesto de forma eficiente y garantizar una distribución más justa de los gastos.
4. ¿Cómo repartir los gastos?
Hoy en día, es común que los gastos se repartan de manera equitativa, sin tener en cuenta las diferencias en los ingresos. Sin embargo, este enfoque puede no ser siempre el más justo. Por eso, es conveniente evaluar la posibilidad de que la persona con mayores ingresos contribuya en mayor medida a los gastos comunes.
5. Objetivos comunes
El ahorro en pareja es más efectivo cuando ambos se comprometen a una meta compartida, como un viaje soñado, la compra de una vivienda o unas vacaciones especiales. Al centraros en un objetivo concreto que os entusiasme a ambos, será más sencillo mantener la motivación. Fijar objetivos concretos también permite elegir la forma más adecuada de organizar las finanzas, porque posibilita aprovechar productos específicos diseñados para el ahorro a corto, medio o largo plazo, más rentables que una simple cuenta bancaria.